, acostumbrado a conquistar grandes títulos, no ocultó la frustración que sintió este domingo tras perder la en Riad, donde Lazio arruinó nuevamente los planes de .

La desazón del astro lusitano fue notoria luego del 3-1 a favor del cuadro romano, que se consagró con el trofeo por segunda vez consecutiva frente al conjunto turinés; sin embargo, se hizo más evidente en la ceremonia de premiación, cuando se quitó la medalla de subcampeón y dejó con la mano estirada a un directivo que esperaba felicitarlo.

Lazio venció Juventus con goles del español Luis Alberto, el bosnio Senad Lulic y Danilo Cataldi, conquistando la quinta Supercopa de su historia, la segunda consecutiva a costa de la ‘Vieja Señora’.

Tras imponerse a Juventus en la Supercopa de 2017 en el Olímpico romano e infligirle el único revés en la presente temporada hace dos semanas, Lazio de Simone Inzaghi volvió a triunfar este domingo Arabia Saudita ante un equipo juventino poco brillante y que había logrado el momentáneo 1-1 gracias a Paulo Dybala.

Fue la quinta Supercopa del Lazio, tras las de 1998, 2000, 2009 y 2017, y la cuarta vez que Juventus pierde este trofeo en los últimos ocho intentos, todos consecutivos.

Por undécima vez en sus 32 ediciones, la Supercopa italiana se entregó fuera de Italia y la Federación de Fútbol transalpina (FIGC) eligió repetir Arabia Saudita como sede, después de que el año pasado Juventus conquistara este trofeo contra el Milan en Yeda.

Este año fue el Estadio de la Universidad Rey Saúd de Riad el teatro de un duelo de alta calidad entre el campeón de Italia Juventus, que compitió con unos dorsales personalizados y nombres escritos en árabe en sus camisetas, y el Lazio, ganador de la Copa Italia.

El conjunto romano mantuvo sin variaciones sus dorsales y nombres en la elástica y exhibió su confianza y calidad, en un encuentro al que llegó con una racha de abierta de ocho victorias consecutivas en la Serie A y como único capaz de derrotar a Juventus en esta campaña.

Con información de EFE