Chiclayo LESTER SOLÍS Pienso, luego... juego. Mayer Candelo es un filósofo de fútbol. Tiene un andar cancino, tránsita lento, pero es de pensamiento sagaz. Su cerebro trabaja a mil por hora, por eso toca, hace la pausa, descarga y deleita. De su mano -o mejor dicho de su zurda mágica- el “poeta” demostró que lo suyo no es puro “floro” y se impuso 3-2 en el “clásico de los millones”. Y pensar que el Aurich dejó escapar a Mayer (dicen por su alta cotización) para apostar por Ciciliano, pero el “pelao” del Vallejo se robó el show en Chiclayo. Fiel al protocólo retornó a la “Capital de la Amistad”, saludó a todo el mundo, se llevó las palmas y se fue vencedor, dando cátedra, una vez más, de buen fútbol. El primer tiempo fue para medir fuerzas y en el complemento empezó la fiesta. Apenas a los 27 segundos, pin-pan-pun y gol del “Ciclón” que parecía sacudirse del trauma copero. El “Burro” Ascoy fue inteligente y fusiló a Pinto. Empero la felicidad se acabó rapidito porque a los 3' el “Chino” Nakaya la colocó de lejos. Golazo y el 1-1. A los 7' el “Cholo” Casas fue más terco que nunca y ganó el rebote en el córner para sacar el zurdazo forzado y vencer a Morales. Sin embargo el “Rei” se iluminó a los 25' para dejar solo a Guizasola, quien mete el centro para la aparición de “King Kong” Tejada. Era el 2-2 y un partidazo. Candelo no perdió la calma, siguió en lo suyo, tocando y desesperando a los chiclayanos, hasta que una triangulación que inicia él provoca un penal contra Aponte a los 40'. Mayer ejecuta fuerte para poner al Vallejo más puntero que nunca. Y aunque al final el “10” trujillano vio la roja, igual se fue entre palmas. Con este triunfo, Vallejo sumó su sétimo partido ganado en forma consecutiva, de ellos, cuatro como visita. Por eso sigue de líder y seguramente irá por más.