Un histórico y humillante 7-0 le aplicó Sport Huancayo en la última fecha del Descentralizado a un débil Coronel Bolognesi, candidato fijo para el descenso. El elenco local -sin su estrella Alex Magallanes- dominó a la visita porque tuvo en César Ortiz su figura más resaltante. El despliegue físico del volante de contención contagió a sus compañeros. En dos ocasiones, a los 18 y 21 del primer tiempo, Ortiz se elevó para cabecear los balones que fueron proyectados por sus compañeros. Con el marcador arriba, los huancaínos siguieron usando la cabeza para ganar este encuentro. En el complemento la supremacía local era notoria. Sin Ortiz, cambiado por lesión, Carlos Ibarra y Blas López hacían de las suyas apoyados en un inteligente Irven Ávila, que a los 13 lanzó un centro, pero Guillermo Esteban se lanzó de palomita para anotar un autogol. Luego Sergio Torales aprovechó un centro de Ávila para anotar el 4-0 a los 17. Después de eso Bolo se cuidó más en defensa. Sin embargo, nada era imposible para el huanuqueño convocado a la selección. Ávila, recuerde bien este apellido, tras jugada personal, marcó el 5-0, a los 36. Con un endiablado Sport Huancayo, el buen paraguayo Blas López tenía que anotar. Lo hizo a los 40 por la vía penal. Dos minutos después, la Rana Huertas se abrazó a la felicidad de un 7-0 justo y contundente, e inolvidable para los huancaínos. Sombreó el balón por encima del golero Ramírez, y selló una goleada que así nomás no se ve en el fútbol peruano, y que le permite a Sport Huancayo ganarse un respeto en la venidera liguilla. Huancayo Jhefryn Sedano