Mauro Guevgeozián fue uno de los futbolistas de Alianza Lima que quedaron más afectados emocionalmente luego de la derrota en la final del Torneo del Inca ante César Vallejo. El armenio pasó de ser el héroe de la final anterior al villano por errar una clara ocasión de gol al inicio del encuentro.
A su salida del Estadio Nacional para marcharse en un auto particular, Guevgeozián no respondió ninguna pregunta de la prensa y se retiró visiblemente molesto. Tampoco tuvo atención para un grupo de hinchas que le mostraron su respaldo pese a la derrota.
El atacante se retiró sin atender a ningún hincha pese a la insistencia. Incluso alguno le pedía entre gritos no bajar los brazos de cara al Torneo Apertura.