Lejos de volver a mostrar sus poses de divo y de insultar a periodistas, el jugador de Juan Aurich Reimond Manco tocó fondo, desnudó su alma y confesó sus más íntimos sentimientos tras su fracaso matrimonial con su todavía esposa Fiorella Vento. “No me vuelvo a enamorar”, afirmó. “Rei” dejó atrás su advertencia de que no hablaría más con la prensa para hacer una excepción en el caso del corazón. Se dio un tiempo para confesar su herida abierta, esa que quiere olvidar con puro fútbol. “Luego de un año de matrimonio va a ser difícil que me vuelva a enamorar. Va a pasar mucho tiempo para que me vuelva a casar. Esto es algo difícil de soportar, pero tengo que sacar fuerzas para superar esto y entregarme por completo al fútbol”, confesó Manco a Frecuencia Latina. El joven futbolista confía en “renacer” en el balompié con la camiseta roja. Superar lo que logró cuando era un “jotita”. “Estar en el Aurich para mí no es un fracaso, sino una oportunidad para demostrarme a mí, a mi mamá y a las personas que me quieren que yo todavía puedo seguir jugando fútbol y jugando bien. Estoy vigente porque soy joven”, aseguró. Al final y para coronar su confesión, Manco insistió con su mísmo discurso de días atras. “Quiero que sepan que voy a hablar con la prensa cuando el club me lo pida, de otra manera no. He llegado de Europa con otra mentalidad, queriendo imponer a la prensa de Chiclayo el 'estilo europeo'. No quiero que lo tomen a mal, pero prefiero manejarme así”, finalizó.