Sabe que en sus manos está el futuro de Alianza en esta temporada, pero Salomón Libman no se presiona. El golero blanquiazul, además de hacer un trabajo exigente día a día, de manera personal se viene preparando en el aspecto sicológico, para tener fortaleza mental en los momentos de mayor presión del campeonato. Para evitar que los fantasmas del 2008 aparezcan de nuevo, debemos estar bien fortalecidos mentalmente. En eso he puesto mucho énfasis, porque sé que hay un buen grupo, que está ilusionado en conseguir el título. Si estamos bien fuertes de la cabeza, entonces todo será más fácil, confesó. Al igual que su técnico Gustavo Costas, Libman piensa que el torneo hay que jugarlo y no andar quejándose por lo complicado que se le presenta el fixture en la segunda rueda. Eso queda de lado cuando hay que jugar de local. En casa hay que sumar la mayor cantidad de puntos posibles y no tendremos problemas, culminó.