Sabe que en la cancha debe ganarse la confianza del entrenador y no quiere irse del equipo. Donny Neyra negó a sus allegados cualquier acercamiento con Juan Aurich de Chiclayo que estaría interesado en sus servicios. Ayer el volante sufrió un esguince leve del tobillo izquierdo. Conmigo no ha hablado nadie del Aurich dijo el Gordo en el vestuario y con eso de cuajo zanjó la pretensión de los chiclayanos para que haga dupla con Mayer Candelo en el Norte. Después durante la práctica, Neyra chocó con Galliquio en una disputa de balón y acusó un golpe al tobillo izquierdo por lo que le aplicaron hielo y se puso a un costado de la cancha, pero ni por eso le permitieron que deje de entrenar. El asistente Gerardo Calero, lo ayudó para que culmine todas las rutinas asignadas por el preparador físico Mario Mendaña, en el entendido que ese golpe no era motivo de consideración para que se excluya de los trabajos.