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El presidente del Consejo Superior de Deportes anunció hoy la suspensión cautelar de Ángel María Villar como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), en tanto la UEFA y la FIFA, donde este ejercía ambas vicepresidencias seguirán el mismo camino. El dirigente español es amigo personal de Manuel Burga, expresidente de la FPF, encausado en Estados Unidos por el escándalo de corrupción de la FIFA.
Ángel Maria Villar está encarcelado desde el pasado día 20, acusado de administración desleal, apropiación indebida y/o estafa, falsedad documental y corrupción entra particulares. También están encarcelados su hijo, Gorka Villar, y el vicepresidente primero de la Real Federación Española de Fútbol y responsable de la federación territorial tinerfeña, Juan Padrón.
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Una vez suspendido de sus funciones como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) por un año, el siguiente paso a eliminar eran sus puestos en los organismos internacionales. El ya expresidente de la Real Federación Española de Fútbol era vicepresidente de la FIFA y la UEFA, en ambos organismos.
Con el despido de Ángel María Villar al frente de la Real Federación Española de Fútbol se acabó esta tarde con 29 años de mandato del dirigente vasco, amigo personal de Manuel Burga, expresidente de la FPF, quien tras varias reelecciones se mantuvo 24 años en el cargo y ahora esprocesado por el caso denominado FIFA-Gate en los Estados Unidos.