Hoy no será un día cualquiera para Roberto Mosquera. Desde las 2:45 p.m. (hora peruana) ante la selección del País Vasco, el estratega cumplirá su máximo sueño: dirigir a la selección peruana, aunque sea en un partido amistoso.
Buen juego
El técnico del Ciclón ha afrontado esta única oportunidad con la seriedad de un partido oficial y, a pesar del universo limitado de jugadores, priorizará la posesión de la pelota y el buen juego.
El sistema que utilizará la bicolor será un 4-3-3 para poder aprovechar las bandas y tener un tránsito rápido de defensa a ataque y así contrarrestar las velocidad del rival. Para eso contará con dos hombres rápidos como Advíncula y Yotún. En el mediocampo el encargado de generar fútbol será Rinaldo Cruzado, resguardado por Óscar Vílchez y Adán Balbín. La sorpresa en la nómina inicial es la inclusión de Jorge Bazán, quien estará en el ataque junto a Juan Carlos Mariño y Daniel Chávez.
Tradición vasca
Para el equipo vasco este encuentro servirá para estrenar el remodelado estadio San Mamés y seguir con la tradición de jugar en estas fechas. El equipo de José Mari Amorrortu y Mikel Etxarri es una escuadra plagada de jugadores jóvenes, la mayoría del Athletic de Bilbao y donde destaca el mediocampista del Real Madrid Asier Illarramendi, quien es uno de los símbolos de este equipo.
Los bilbaínos, quienes tampoco contarán con sus principales figuras, como Xabi Alonso y Javi Martínez, son una escuadra muy rápida que aprovecha la velocidad para hacer daño. Además, tienen un jugo muy frontal.