Escriben Eduardo Gamarra y Estalin Colqui
La selección Sub-17 de Perú del 2007, guiada por Juan José Oré, hizo historia al clasificar al Mundial de su categoría, donde llegó hasta los cuartos de final. De aquel grupo, solo Reimond Manco logró emigrar al extranjero, aunque luego regresó. Néstor Duarte juega en la "U", Luis Trujillo en Alianza, Irven Ávila en Cristal y Alonso Bazalar en Pacífico. Los demás luchan para no ser parte de la generación perdida del fútbol peruano.
"Nos abandonaron"
"El Mundial fue algo muy bonito. Cada uno soñó que el destino sería otro, pero a unos les acompañó la suerte y a otros no", reflexiona "Cutito" Zevallos.
"Decían que todos estábamos para la selección, que teníamos que emigrar al extranjero. Al final, el único que lo hizo fue Reimond Manco y ahora unos cuantos que ya están consolidados alternan en la selección mayor y da gusto verlos. Luego del Mundial hubo un proceso que no supieron llevar. Se venía la Sub-20 y no convocaron a muchos de nosotros. Fue otra generación y prácticamente nos abandonaron, pero cada uno ve su rumbo", lamenta.
"Poco a poco comenzamos a perder continuidad y al no figurar en los medios como antes pasábamos inadvertidos", agrega.
"Después del Mundial Sub-17, el 2008 jugué en Aurich. Contractualmente estaba ligado a la "U" y el 2009 fui a préstamo al Chalaco. El año siguiente regresé a la U hasta que culminó mi contrato. Me fui a José Gálvez con el que logré el ascenso, pensé que me podía quedar y no fue así. Pasó el tiempo y emigré al UTC en Copa Perú", prosigue.
"Ahora estoy en el San Alejandro de Pucallpa que jugará la Segunda, tengo una familia que mantener y un hijo", acotó.
Otra oportunidad
"Sé muy poco de mis compañeros. Solo de los que están en el Boys, donde actualmente entreno. A algunos les está yendo bien y me alegro. Otros se han alejado del fútbol. Por distintas razones han seguido caminos diversos", nos dice Joseph Muñoz. Luego agrega: "todavía estamos en una edad donde podemos conseguir cosas importantes. Vamos a ver qué es lo que pasa".
"Muchos debutamos llegando del Mundial. Por diversas razones unos se mantienen jugando y otros no. Si uno quiere conseguir sus sueños tiene que seguir tras ellos, no? Manco, Duarte, Ávila, Trujillo, Alonso Bazalar, Juan Arce, Bryan Salazar, César Ruiz, Gary Correa, Dany Sánchez. La mayoría pudo llegar, la cosa es que tener oportunidad y demostrar", afirma.
"Manco fue el único que fue al extranjero, tuvo la suerte, lástima que no pudo aprovecharlo, pero aún estamos en edad de emigrar", añade Joseph.
"Somos la generación perdida? Son cosas que se dicen, porque quizás esperaban más de nosotros al llegar a un Mundial. Lo tomo con tranquilidad, porque sé que sigo por el camino que quiero, tratando de conseguir mis objetivos", finaliza.
Tiempo perdido
"El 2007 se formó un bien grupo con el profesor J. J. Oré, quien era importante para nosotros y eso fue lo que demostramos", recuerda Jersy Sócola.
Después de eso "varios aprovecharon su oportunidad, otros no, pero todos han jugado Primera y están capacitados para estar ahí. Irven Ávila en Cristal, Luis Trujillo en Alianza, César Ruiz en León, Dany Sánchez y Gary Correa en Inti Gas y otros vamos a esperar el turno. No somos la generación perdida, cada uno busca su destino", apunta.
"No he tenido mucha suerte, prácticamente en el mejor momento de mi carrera he tenido lesiones a la rodilla, pero el apoyo de mi familia me ha mantenido fuerte y acá estoy. Tenemos un negocio con la familia. Gracias a Dios estamos bien", revela.
"Jugué en Alianza Atlético dos años consecutivos, el equipo descendió, pero aún tengo 22 años. Salió la posibilidad de ir al Cerro Porteño del Presidente Franco de Paraguay, estuve dos semanas, pero el tema económico no ayudó mucho y tuve que regresar. Ahora espero unas propuestas para jugar en Segunda División", cuenta.
"Pasé muchas cosas"
Alonso Bazalar regresó al fútbol profesional en Pacífico de la mano de su padre el "Juanca", luego de no poder destacar antes en Alianza y Cienciano, e irse a la Copa Perú.
"Después del Mundial Sub-17 he pasado muchas cosas. Estoy a punto de cumplir 23 años y todo lo bueno y malo me han ayudado a madurar. Estuve año y medio en Alianza, luego fui a Cienciano, después Vallejo, pasé a Los Caimanes y hoy estoy en Pacífico. Pensé dejar el fútbol, pero lo conversé con mi familia y con sus consejos decidí continuar", confiesa.
Ya no se comunica con sus excompañeros de selección. "Solo con mi gran amigo Juan Arce, porque estamos en Pacífico, y con mi compadre espiritual Luis Trujillo, soy padrino de su hija. Pero de muchos no sé", dice.
No considera que esta sea su última oportunidad. "No lo tomo así, pero con todo lo que he pasado, ahora valoro más las cosas que poseo", culmina.
En la bolsa
Juan Arce tiene su propia explicación. "En aquel tiempo no había bolsa de minutos ni el Torneo de Reservas como ahora. Si hubiéramos tenido todo eso de seguro estaríamos con más recorrido. Gracias a Dios en Boys tuve la continuidad que quise. Aquel año estaba en Cristal y pedí que me dieran a préstamo para seguir jugando, porque sabía que ahí no tendría oportunidad. Hoy no debo defraudar la confianza del profesor Bazalar", expresa.
"Con Alonso (Bazalar) somos muy amigos. Ávila va bien en Cristal, Gary está en Inti Gas y la mayoría está jugando en Segunda División o Copa Perú, ojalá crezcan y vuelvan los Jotitas", concluye.