Con Raúl Ruidíaz todo el partido, el Monarcas Morelia empató 2-2 con Necaxa y ahora deberá esperar otros resultados para saber si obtendrá un cupo a la Liguilla final del Clausura 2018 de la Liga MX.
No fue un buen partido para el equipo de Raúl Ruidíaz, quien reapareció tras su fecha de suspensión. Y es que el rival tuvo las mejores ocasiones para ganar el encuentro, pero su errores defensivos le pasaron factura.
El paraguayo Carlos Gonzalez abrió el marcador en favor de los 'Rayados' (19'); pero la celebración duro poco porque Raúl Ruidíaz apareció de penal para poner el 1-1 en favor del Monarcas Morelia (22'). La 'Pulga' engañó a Barovero y la envió al fondo.
En el segundo tiempo, nuevamente Carlos Gonzales puso en ventaja al Necaxa (81'), que con ese resultado aseguraba su pase entre los ocho mejores de la Liga MX; pero Gerardo Rodríguez, en un buen contragolpe, puso el 2-2 final (84') que mantiene en suspenso al equipo de Raúl Ruidíaz.
Monarcas Morelia sumó 24 puntos, momentáneamente está sexto en la tabla y debe esperar que Tijuana no le gane al Toluca. Si eso no sucede, debe aguardar que Pachuca no le gane al Atlas. Caso contrario, necesita que Pumas pierda ante Querétaro. Solo así podrán avanzar a la Liguilla.
El gol de Ruidíaz
Luego de cumplir su fecha de suspensión, Raúl Ruidíaz volverá a comandar el ataque del Monarcas Morelia y será la principal esperanza de gol de su equipo. La 'Pulga' se perdió el partido contra Cruz Azul, pero regresa cargado de goles que tratará de reflejarlos esta noche.
Roberto Hernández, técnico del Monarcas Morelia, confía en sacar un buen resultado y así meterse entre los ocho mejores del Clausura 2018. "Tendremos un partido duro contra un rival que tiene las misma opciones que nosotros. Necesitamos salir concentrados los 90 minutos y evitar expulsiones o lesionados. Confiamos en competir y sacar un buen resultado", dijo.
Raúl Ruidíaz espera hacer un buen partido y continuar por la senda del gol. Monarcas Morelia necesita de él esta noche y el delantero peruano promete no defraudar a la hinchada.