En nuestro país, Paolo Guerrero es un icono del fútbol en toda su expresión. Una historia de sacrificio, con altas y bajas, goles y palos, triunfos y derrotas, sonrisas y muchas lágrimas. A lo largo de las últimas cuatro eliminatorias que la selección peruana no logró la clasificación a un Mundial, un grupo de jugadores, entre ellos el 'Depredador' escribió, quizás, las historias más grises de la Blanquirroja, sin embargo Rusia 2018 rompió esa mala racha e inició una nueva era.El Libro de El Bocón 'Nueve historias de un Guerrero' repasa las etapas del capitán de todos a lo largo de su carrera.
Para nadie es un secreto que el primer amor de Paolo Guerrero fue Alianza Lima, sin embargo no llegó a debutar en el club de sus amores, pues una gran oferta, en el 2002, irrumpiría en su paso como íntimo y le abrió las puertas a la Bundesliga. El 6 de setiembre de ese año, Bayern Munich anuncia su fichaje y sería el primer gran paso del 'Depredador', tal como lo detalla el Libro de El Bocón.
Con tres temporadas en el primer equipo del Bayern Munich, Paolo Guerrero cambiaría el cuadro bávaro por el Hamburgo, donde tuvo su mejor rendimiento en la Bundesliga. Jugó 134 partidos, marcó 38 goles y asistió en 15 oportunidades, cifras en azul para el 'Depredador'. Para la temporada 2011-12, el delantero de la selección peruana dejaría el viejo continente para volver a Sudamérica. "Quiero ser campeón del mundo, mamá. Eso es lo que quiero y para eso voy a Brasil", recuerda doña Peta en Libro de El Bocón.
El Guerrero chegou
Tras su paso por la Bundesliga, Paolo Guerrero retornaría a Sudamérica para seguir cosechando retos y triunfos. Desde Brasil anunciaban su fichaje al Corinthias como uno de los mejores de los últimos años. Con el 'Timao' tendría una historia de amor que no terminaría bien.Fue campeón mundial de clubes, anotó el gol del título, y se convirtió en goleador. Rápidamente tuvo afinidad con la hinchada que no pararía de hablar de él, como bien lo señala el Libro de El Bocón.Tras cuatro años en Corinthians, Paolo Guerrero dejaría el 'Timao' y ficharía por Flamengo (2015). Conocido por sus goles y su talento con la pelota, la hinchada del 'Mengao' lo acogió y se rindió a sus pies. Con goles y buenas actuaciones, el 'Depredador' seguiría rompiéndola en Brasil. En el 'Fla' lleva 352 partidos y ha marcado 135 goles en las diversas competencias del país carioca.
Amor rojo y blanco
El 17 de noviembre de 2004 un nombre y hombre comenzaría una historia con la selección peruana. Hasta ese momento, quizás, las miradas de los hinchas blanquirrojos no caían sobre Paolo Guerrero. Sin embargo, ese día el 'Depredador' anotaría su primer gol con la bicolor e iniciaría su romance más puro e incondicional que se pudo ver de un delantero hacia su país. El Libro de El Bocón recuerda que con el primer gol de Paolo Guerrero con la selección peruana se ganó 2-1 a Chile.Criticado por algunos partidos y accionar con la selección peruana, Paolo Guerrero fue cambiándole el pensamiento a los hinchas nacionales tras su buena actuación en la Copa América 2011, como se cita en El Libro de El Bocón. Años atrás un terremoto remeció la interna de la blanquirroja, el tan sonado 'Caso Golf Los Incas' tuvo muy molestos a la afición, se tomaron medidas que abrieron paso a nuevos nombres y entre ellos, el del 'Depredador' comenzaría a sonar con más fuerza, pues brillaría en las siguientes actuaciones.
Como bien se lee en el Libro de El Bocón para ese año, Paolo Guerrero comienza a ser una pieza fundamental en la selección peruana. No solo por sus goles, también por su actitud, su manera de pelear cada balón y sentir una derrota como una frustración y traición al hincha que esperaba celebrar. Y así pasaron los años para que él y los otros seleccionados de cierta manera le regalen la alegría más grande a un país amante del fútbol, pero muy golpeado por el mismo.
Para estas eliminatorias, Paolo Guerrero lideró el grupo dentro de la cancha. Con garra y un cambio de actitud impulsado por Ricardo Gareca, la selección peruana logró el ansiado boleto a Rusia 2018, sin embargo el 'Depredador' no estuvo para el repechaje ni los amistosos por la suspensión del TAS y su lucha insaciable por llegar a cumplir su sueño de niño. Movilizó un país que está acostumbrado a no perder las esperanzas y de cierta manera debía agradecerle por todo lo que él y los muchachos de la 'sele' le regalaron a un país cansado de tanta mala racha en el fútbol.
LEE TAMBIÉN: