Muchos han criticado el trato brusco y sincero que Natalia Málaga imparte a sus dirigidas, ya sea en la selección juvenil o en la de menores de vóley peruano.
Para las flamantes campeonas del Sudamericano Juvenil de Vóley de Menores, las palabras de Natalia Málaga sirven para que “pisen tierra” y les haga ver la realidad.
Y es que Málaga ha sido grabada en varias oportunidades “guapeando” a sus dirigidas con varis “ajos y cebollas”, acto que mucha gente ha criticado, pues considera que es humillación pública.
Previo a su partida a Juliaca en donde las “matadorcitas” jugarán un amistoso con Chile, EL BOCÓN pudo recoger algunos testimonios del día a día de las jugadoras con Natalia y nos indicaron que no les disgusta la manera de trabajar de la ex jugadora y ahora entrenadora de la selección de vóley de Perú.
Cristina Cuba, una de las referentes del equipo y a quién se le ha visto recibir más de un grito por parte de Málaga nos comentó: “Se necesita disciplina para hacer grandes cosas. Parte de ese trabajo es llevarnos unos gritos cuando hacemos las cosas mal. Sabemos lo profesional que es Natalia y que todo lo hace por nuestro bien”.
Mientras que Rosita Valiente comentó que “los gritos en el deporte son normales, pues te enseñan a adquirir caracter y a sacar garra cuando más lo necesitas”.