De ganarlo sería para mi padre. Él me enseñó que para ganar hay que ir despacio, con calma, dice el Mono Orlandini con la convicción de quien se sabe con suerte. Él no lo dice pero la confianza esta ahí, en su Mitsubishi listo para correr la segunda etapa rumbo a Ayacucho. Su mejor copiloto lo guía desde el cielo. Su padre. -Irá dedicado para papá de todas maneras... -Seguro que sí, se lo dedicaría a mi padre al 100 por ciento, pero esto recién empieza, él me enseñó que hay que tener paciencia y calma, que era la mejor manera para competir en toda la carrera y terminarlas. -Este año está para darse, no podrías estar mejor para la carrera... -Sí, es cierto, el auto está muy bien y yo me siento bien, pero todo con calma, hay que ver cómo nos va en la tercera etapa, ahora estoy tranquilo. Cábala? No. No soy de cábalas, sólo estar muy concentrado. -Tú padre decía que ganar la primera era la más difícil, las otras vienen solas... -Sí, decía eso y es muy cierto, a él le tomó mucho trabajo ganar por primera vez, luego fue varias veces campeón, igual que mi tío Dibós, por eso la calma. -Pero tú te caracterizas por ser loco, como dice tu madre... -Pero he aprendido, por eso no me creo aún favorito, estoy tranquilo y listo para seguir corriendo, el auto está bien y ahora vamos por el segundo tramo que es más complicado. -Cuándo se verá a los favoritos entonces? -A los favoritos se los verá en el tramo de Cusco a Arequipa, ahí es donde las papas queman. -Cuáles son los grandes obstáculos? -Hay que cuidar mucho el auto porque esta carrera es impredecible, esta primera etapa ha sido la más sencilla, apenas estamos al 10 por ciento. -Sin embargo Fuchs y Pardo serán duros escollos... -Fuchs es peligroso pero no es invencible, tiene un buen equipo, el malestar que lo afectó nunca me favoreció, me hubiera favorecido si yo hubiera estado bien, pero sufrí de soroche. -Y Tito Pardo? -Tito siempre es peligroso, sobre todo en carreras largas como estas, pero esto recién empieza. En la parte del asfalto Pardo me superó. Ya después en tierra recuperé fuerzas y lo volví a pasar.