En 2012, mientras Tite se encontraba entrenando al Corinthians de Paolo Guerrero, se había encontrado con Neymar en la liga cuando jugaba para el Santos. El crack brasileño era ya una realidad, pero también exageraba en las faltas.
En ese momento, el jugador del PSG ya era conocido por su capacidad para caer rápidamente al suelo para reclamar faltas. Esas acciones no agradaron a Tite, hoy técnico de la Selección de Brasil.
“Neymar cayó, rodó ... Y cuando el oponente fue expulsado, se levantó ... ¡y estaba bien! Gane o pierda, sí, pero pretende hacer algo que no es parte del juego. Es un mal ejemplo para los niños, para mi hijo y para aquellos que lo ven”, dijo Tite en alusión a la desproporcionada forma de sus revolcadas en el campo.
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