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Cristiano Ronaldo, esperado como "salvador" por el Real Madrid, se anotó un auténtico "gol en contra" que podría perjudicar su imagen, al agredir en Lisboa a un fotógrafo y a una menor de edad. El nuevo jugador del Real Madrid admitió el hecho y se disculpó por las agresiones, ocurridas el domingo a la noche en un barrio residencial de la capital portuguesa. En el barrio Parque das Nacoes, Ronaldo atacó a puntapiés el vehículo de un fotógrafo, quebrando un vidrio del auto y causando según medios lesiones a una joven de 17 años que acompañaba al profesional. La joven fue internada en un hospital y presentó denuncia en una comisaría. El ex jugador de Manchester United afirmó que lamenta lo ocurrido, pero al mismo tiempo justificó en parte su reacción, afirmando que él y su madre son víctimas de "persecución" y de "emboscadas". El portugués destacó que el fotógrafo lo persiguió durante varios días por las calles de Lisboa y que permaneció mucho tiempo frente a la puerta de su casa. Según Ronaldo, el hombre se alimentaba prácticamente sólo de yogur y no soltaba la cámara que tenía en sus manos, esperando que algo pasase. "El fotógrafo intentó vender un video de la agresión a la empresa que me representa. Fue un intento de extorsión. De esto se ocuparán los abogados", afirmó. "Esta persecución causó a mi madre un estado tan grande de perturbación y aflicción que me sentí obligado a parar mi auto para convencerlos de que nos dejen en paz", dice el comunicado.
