Liverpool hizo el milagro ante Barcelona. El elenco dirigido por Jurgen Klopp remontó un 0-3 y logró meterse a la final de la Champions League por segundo año consecutivo y espera al ganador de la llave del Ajax ante Tottenham. Lo más heroico por parte del equipo inglés, es que lo lograron sin dos de sus titulares: Mohamed Salah y Roberto Firmino.