El año 2016, para el argentino Lionel Messi, sin duda, no fue el más regular, pues todos los objetivos que tenía con el Barcelona y con la selección argentina, se los arrebató el delantero del Real Madrid, Cristiano Ronaldo.
Tras ganar su quinto balón de oro a inicios del año, el argentino pisaba un 2016 donde tenía todas las de ganar, pues iniciaba una gran temporada con el Barcelona y además, se venían partidos importantes con su selección y la tan ansiada Copa América Centenario, donde se cobraría la revancha.
Sin embargo, el 2016 para Lionel Messi, se convertía en la sombra del jugador argentino quien se convertía en el rey de las portadas de los diarios en el mundo por todos los fracasos que iba obteniendo. El primero fue con el Barcelona, que solo llegó a los cuartos de final de la UEFA Champions League 2015-16, que resultó ser eliminado por el Atlético de Madrid.
Cuando se pensaba que el fútbol no golpeaba dos veces, la vida le tenía preparado al argentino, una serie de avalanchas que probarían su fortaleza. Lo primero que ocurrió en este 2016 para Lionel Messi, fue el caso de fraude fiscal, por lo que el jugador argentino y su padre fueron acusados. Algunas irregularidades en los contratos que firmaba el jugador argentino, levantaron sospechas en el juzgado que pedía la pena de 22 meses de prisión, en caso sean declarados culpables. 4.1 millones de euros (unos 4.5 millones de dólares) entre los años 2007 y 2009 destruyeron al argentino anímicamente. Este suceso ocurrió en el mes de junio, los primeros días, cuando el argentino se preparaba para disputar la Copa América Centenario.
Pero el gran bajón del delantero argentino llegaría para celebrar los 100 años de la Copa América, en el cual, la revancha estaba a la vuelta de la esquina, pues se volvía a encontrar con la selección chilena. Todo el mundo, no solo la hinchada argentina, tenía la fe puesta en el argentino, quien se convertía en la presión emulada en persona.
La decepción llegó cuando la selección chilena volvió a coronarse como la mejor selección de Sudamérica y la renuncia de Lionel Messi no se hizo esperar. El argentino renunciaba a todos los sueños que tuvo de niño por la derrota ante Chile. Con ese suceso, el año 2016 de la 'pulga' se convertía en el peor de todos sus tiempos, pues además de no lograr el título de la Copa América Centenario, Lionel Messi, no logró ser la pieza clave de la selección argentina que está a un paso de no ir al Mundial Rusia 2018.
Pero para cerrar el mal año del argentino, el balón de oro tenía que hacer su debida aparición y entregarse en pleno al jugador luso, Cristiano Ronaldo, quien recibió todo lo contrario a lo que el delantero argentino obtuvo del año 2016.
Aun así, Lionel Messi terminó el año siendo el máximo goleador del mundo con 59 goles, por encima de Cristiano Ronaldo que termina con 54 anotaciones.
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— Diario El Bocón (@elbocononline) 22 de diciembre de 2016
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