Un insólito hecho se produjo en la final de Carabao Cup protagonizada entre Chelsea y Manchester City, un minuto antes de irse a la definición por penales en Wembley, el español Kepa Arrizabalaga se negó a salir del campo de juego, luego de que su técnico Mauricio Zarri lo ordenara desde el banquillo debido a que minutos antes había estirado tras un disparo de Sergio Agüero.
Mauricio Sarri explotó, Willy Caballero se encontraba en el borde del campo sin entender lo que pasaba mientras el español desafiaba al técnico italiano, asegurando que se encontraba en óptimas condiciones para atajar los penales de la Carabao Cup. Estratega casi se va de la cancha por el enojo, pero según las reglas del fútbol el portero estaba en todo su derecho quedarse. 'Si un jugador que va a ser reemplazado rehusara salir del terreno de juego, el partido continuará', declaró Eduardo Iturralde para el programa español 'Carrusel Deportivo'.
El español Eduardo Iturralde (31 años ejerciendo de árbitro, 17 de ellos en primera y 15 como internacional,) aseguró que las reglas apoyan al futbolista en su decisión de salir o no del terreno. El colegiado europeo lo citó en la Regla 3, apartado 3, punto 4 de las reglas del fútbol.
El cuarto árbitro incluso levantó la tablilla con los cambios. El 1 se marchaba por el 13 de Caballero. Kepa, ya en pie, alzó la mirada y lo divisó. Rápidamente le dijo a Sarri que no, que lo parara, que estaba bien. Pero Sarri no quería dar marcha atrás. Quería que el cambio se produjera.
Kepa se mantuvo impertérrito y no salió, Sarri amagó con irse y solo el pitido final dio un poco de tregua. Los jugadores del Chelsea se acercaron a hablar con el transalpino, el español se dio la mano con Caballero y comenzó la preparación de unos penaltis que podían alzar al cielo o bajar a los infiernos al portero. Al final la victoria fue 4-3 para Manchester City.