El encuentro entre Colo Colo y Wanders por el apertura chileno fue suspendido por los graves incidentes que se registraron en Valparaíso. En la previa al encuentro los barristas de ambos equipos originaron desmanes en los alrededores provocando el pánico entre los transeúntes y los verdaderos hinchas que fueron alentar al estadio. Los incidentes también se trasladaron al interior del estadio.
Cuando los jugadores se disponían a entrar al campo de juego, los barristas de ambos equipos invadieron el terreno del Elías Figueroa, enfrentándose entre ellos con piedras, fierros e incluso lanzándose bombas de ruido. Luego de cerca de 10 minutos, el árbitro del partido, Enrique Oses, optó por suspender el encuentro.
"Las autotidades de la ANFP deberán ver qué pasa con el partido", manifestó el juez del encuentro tras la irrupción de los hinchas. Debido a esto, y tras sufrir contratiempos por un accidente carretero, el bus de Colo Colo debió evitar pasar por la zona para evitar exponer al plantel de jugadores en su llegada al estadio Elías Figueroa.
A través de las redes sociales, hinchas de Wanders habían anunciado durante la semana que iban a intentar frenar el acceso de hinchas de Colo Colo que además podrían poner en riesgo el desarrollo del encuentro. Incluso, el Metro de Valparaíso debió suspender su servicio para evitar que se produzca elgún encuentro entre barristas al interior de los vagones.
Hasta ahora se reportan por lo menos 7 personas heridas, incluso una de ellas con herida de bala en un pie, tal como lo confirmó el Coronel de Carabineros Fernando Baywather. En tanto, Christofer Gonzáles había sido considerado en la convocatoria para el encuentro ante Wanders.