Las cosas se salieron de control y el de negro terminó pagando los platos rotos gracias a un escándalo. La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) anunció que espera el informe de un partido entre equipos sub'18 de la Universidad Católica y el Aucas en el que el árbitro Marco Villacías fue agredido para fijar sanciones ejemplares al tiempo que se pidió suspender al equipo del que partió el ataque.
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Durante el partido jugado, uno de los miembros de la comisión técnica de la Universidad Católica agredió a patadas al central Villacís por conceder un penalti al Aucas. El árbitro fue perseguido por miembros de la Universidad Católica, que ganaba por 1-2 cuando se produjo el penalti, en el minuto 90.
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Un hombre, apenas reseñado por fotografías hechas por periodistas que cubrían el encuentro, lo impactó con un patada. La Policía, entonces, intervino y el partido se reanudó con la ejecución del penalti que dejó el encuentro con empate a 2.
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En forma simultánea el Presidente de la Asociación de Árbitros del Ecuador, Luis Muentes, anunció que solicitará la expulsión del torneo del equipo sub'18 de la Universidad Católica.
Selección peruana: ?Falcao elogió el peso goleador de Paolo Guerrero https://t.co/hQcHil9dBH pic.twitter.com/MrGI00P397
— Diario El Bocón (@elbocononline) 23 de marzo de 2017
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