Barcelona intentará conquistar el único título sin trofeo que no tiene, el de una remontada en la Liga de Campeones, algo que no consiguió en el pasado ante el Inter de Milán o el Chelsea, y para ello necesita superar el 2-0 con el que llega el Milan al Camp Nou.
El equipo azulgrana se ha ido apagando poco a poco en el último mes. Messi sigue marcando, pero al equipo le cuesta más y no tiene los la magia del pasado, especialmente en defensa, el talón de Aquiles de los culé y ese detalle es fundamental.
Además, la baja de su entrenador Tito Vilanova, quien se recupera de un cáncer en Nueva York, pesa en el ánimo del equipo y también en la toma de decisiones tácticas.
Frente al Milan, la posibilidad de jugar con un nueve puro para que los centrales no ayuden en el marcaje de Messi gana aparece como ideal. Sánchez y Villa son los candidatos, y el chileno parece estar un escalón por encima del asturiano.
Muchas sorpresas no se esperan. Alves, Piqué, Puyol y Alba compondrán la defensa; Busquets, Xavi e Iniesta estarán en la zona de creación y Messi podría estar acompañado en ataque por Pedro y Alexis.
Esa parece ser la consigna en el equipo italiano. En San Siro, en un partido que parecía abocado al empate, los milanistas sacaron el máximo provecho de dos acciones puntuales.
Allegri no variará su dibujo, un esquema que le ha permitido a su equipo remontar hasta la tercera posición en la Serie A. La principal baja será la de Gianpaolo Pazzini, lesionado, mientras que sí viajara el francés Philippe Mexes, aunque su concurso se mantiene en duda.
En ataque, sin Mario Balotelli, las opciones pasan por el "Faraón" Stephan el Shaarawy y el ghanés Kevin Prince Boateng.