El centrocampista brasileño Kaká, presentado ayer como jugador del Real Madrid, durante su primera rueda de prensa en su nuevo club destacó los alicientes del proyecto que le ofreció el presidente Florentino Pérez, puntualizando que el equipo madrileño era su única opción de salir del Milán. En enero el Milán abrió las puertas por primera vez a un jugador. Eso nunca había ocurrido antes en el Milán. En un momento de crisis mundial y aquél momento fue muy emotivo para mí y lo entendí. Tras el campeonato, de nuevo el Milán me llamó para conversar otra vez y decir que había ofertas. Habló de crisis y problemas y de que estaba abierto a una negociación, Era la segunda vez. Y tuve que decidir. Pero sabía que una vez que los seguidores, se quedó escaso. El grandioso acto duró media hora y concluyó con una paseo del brasileño por el campo saludando a todos los hinchas congregados. La cara de sorpresa acompañó al tímido Kaká durante todo el evento. Por la mañana, el brasileño que costó 91 millones de dólares, pasó un completo examen médico, físico y radiológico, además de a un estudio específico biomecánico, en el Hospital Sanitas La Moraleja de Madrid. En todo momento estuvo acompañado de su padre. saliera del Milán quería jugar en el Real Madrid; ese era mi deseo, subrayó Kaká. El brasileño reconoció que su ex técnico milanista, el italiano Carlo Ancelotti, le llamó para convencerle de que fichara por el Chelsea. Le fui sincero y le agradecí a Ancelotti por todo lo que hicimos juntos y lo que ganamos. Pero le dije que si salía del Milán era para jugar en el Real Madrid, insistió. Kaká se sintió desbordado por la expectación levantada. Con la presencia de más de 40 mil espectadores en el estadio Bernabeu. El brasileño contó que Alfredo Di Stéfano, presidente de honor del Real Madrid, le dijo al entrar al estadio: Esto parece Maracaná. El Real Madrid tuvo que abrir más puertas de las inicialmente pensadas para satisfacer las pretensiones de los asistentes. El fondo norte del estadio, lugar reservado para dar entrada a los seguidores, se quedó escaso. El grandioso acto duró media hora y concluyó con una paseo del brasileño por el campo saludando a todos los hinchas congregados. La cara de sorpresa acompañó al tímido Kaká durante todo el evento. Por la mañana, el brasileño que costó 91 millones de dólares, pasó un completo examen médico, físico y radiológico, además de a un estudio específico biomecánico, en el Hospital Sanitas La Moraleja de Madrid. En todo momento estuvo acompañado de su padre.