George Boyd marcó un golazo de bolea y de media cancha al Huddersfield en el fútbol inglés.
El jugador del Peterborough recibió un pase de su compañero y empalmó el balón como vino, haciendo inutil los esfuerzos del golero rival por atajar el disparo.
Finalmente el encuentro terminó por 3-1 en favor del equipo de Boyd, pero sin duda el gol del jugador pagó todas las entradas del partido.