Llegó a Chile desde Nigeria con el sueño de tener éxito en Sudamérica como futbolista. Se probó en equipos como Audax Italiano, Melipilla y finalmente en la Universidad de Concepción, pero no quedó en ningún club y terminó en este último como utilero.
¿Cómo así?
El nigeriano llamado Loveday fue llevado a Chile por un empresario, pero tiempo después lo abandonó. El jugador fue ofrecido a la Universidad de Concepción para las reservas, con una opción para el primer equipo, pero no fue aceptado.El futbolista no tenía trabajo y necesitaba enviar dinero a su familia, por lo que pidió a este equipo trabajar de lo que sea.
Mario Lucero, gerente de fútbol de la Universidad de Concepción señaló: "Tiene sus papeles al día y vive en una pensión en Concepción. Llegó acá cuando empezamos con una crisis en el área cadetes en utilería. Así partió en el fútbol joven, luego se produjo un cambio en el primer equipo y lo subimos a la utilería. Se dio la posibilidad y ahí llegó", dijo en declaraciones recogidas por Diario Concepción de Chile.
"No es fácil encontrar utileros, cuesta que sepan el trabajo que se debe hacer. La idea que pensábamos en el club era justamente traer alguien como utilero para el fútbol joven y formarlo para que estuviese preparado para el primer equipo. Quiere seguir acá y está feliz", añadió.
Lo quieren
Uno de los futbolistas del equipo, Ronald de la Fuente, contó cómo se vive con el africano como utilero. "Love es súper humilde y alegre. Nos matamos de la risa todos los días. Es el primero en estar y tira sus tallas, que a veces no entendemos mucho. Nos tiene de regalones y hace muy bien la ‘pega’. Tiene gran disposición siempre y se nota que disfruta su trabajo. El grupo lo ha acogido bien, porque sabemos que acá está solo y puede faltarle afecto. Tratamos de reírnos junto a él""Se maneja como futbolista. Es joven, atleta y se nota en su cuerpo que tiene buen físico, ya que se levanta la polera y está todo marcado. Llegó después de la Copa Libertadores y empezamos a ganar. Love fue la cábala", finalizó.