El argentino Gustavo Costas afirmó hoy que ha llegado al banquillo del Atlas a ganar, pero matizó que no es un mago, aunque sí promete ponerse la camiseta para trabajar con plena dedicación.
"Si no vengo a ganar, me quedo en mi casa", dijo Costas en su presentación oficial.
"Uno viene a ganar siempre, no soy mago. Soy un trabajador que cuando asumo en una institución me pongo la camiseta y trabajo 24 horas por ella", añadió el entrenador de 52 años.
"Vivo con la presión, salir subcampeón no serviría de nada. En este mundo sólo sirve ganar", enfatizó.
Costas, quien ha sido campeón con clubes en Perú, Paraguay, Ecuador y Colombia, dijo que esperar tener en México "un equipo ordenado, con equilibrio, con posesión de balón y que lastime cuando ataque".