Se llama Ederzito Antonio Macedo Lopes y hasta este domingo, en la Eurocopa, pocos le habían tenido en cuenta fuera de Portugal o de Lille, donde ha terminado una temporada que comenzó en la Premier League. Oculto entre los grandes nombres de Cristiano Ronaldo, Nani, Ricardo Quaresma y hasta Renato, Éder era casi un componente anónimo de la plantilla de Fernando Santos, técnico de Portugal.
Pero desde este domingo, ya es “Don Éder”. Un delantero potente, sin demasiada técnica, que apareció en el momento preciso para entregar a Portugal la Copa de la Eurocopa cuando más difícil parecía tenerlo pues, Cristiano Ronaldo ya había salido lesionado del campo de juego.
Contestado hasta por la propia afición lusa, que no entendía como se podía incluir en la relación de la Eurocopa a alguien que no había marcado más que tres goles en 28 partidos y estaba lejos de la calidad de Cristiano Ronaldo, Nani o Ricardo Quaresma, Éder llegó a asegurar al comienzo de la concentración en Marcoussis, Francia: “No tengo que demostrarle nada a nadie”.
Se lo había demostrado a Fernando Santos, que confío en el momento que vivió en el Lille, donde en media temporada anotó seis goles y dio cuatro asistencias. En estratega quedó encantando y no dudo en llamarlo a la Eurocopa.
Revivió en Francia tras un pobre paso por el Swansea, que apenas contó con el exdelantero del Sporting de Braga. Con apenas 13 minutos en dos partidos de esta Eurocopa (6 contra Islandia y 6 ante Austria en la primera fase, en ambos casos como sustituto de André Gomes), el destino le guardaba a Éder el mejor final posible y que nunca se iba a imaginar.
Fue en el minuto 109 de la prórroga, cuando Portugal comenzaba a creer en sus posibilidades gracias a un golpe franco que envió al alarge Raphael Guerreiro, cuando enganchó un balón fuera del área y lo colocó esquinado, fuera del alcance de Hugo Lloris. Para meter a Portugal en la historia, para ganarse un sitio entre los grandes de todos los tiempos del fútbol luso.
El originario de Guinea Bissau estampó su nombre en los libros de fútbol de Portugal para nunca más salir.
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