Y llegó el día en que la Selección Alemania tenía que superar ese maleficio frente a su similar de Italia, a la cual no podía ganar en una competencia oficial. Los teutones alemanes en una dramática definición por penales se impusieron 6-5 y clasificaron a la semifinal de la Eurocopa 2016. ¿La figura del cotejo? Sin dudas es el arquero Manuel Neuer, quien fue pieza fundamental durante la definición desde los doce pasos.
Escribe: Martín Chilo Espinoza
Durante el tiempo regular y la prórroga quedaron empatados 1-1. El marcador fue el fiel reflejo de lo sucedido en el estadio de Burdeos por los cuartos de final de la Eurocopa 2016. Los aficionados esperaban un duelo de ida y vuelta, pero se equivocaron, porque el compromiso se caracterizó por la rigidez táctica y el respeto que se tuvieron las dos selecciones.
En el primer tiempo, los alemanes tuvo el balón pero no combinó, mientras que la Selección de Italia trataron de ejercer la misma presión alta, que ahogó a España, pero sobre todo, quiso reducir al máximo los errores. Entre las dos, ofrecieron un pobre espectáculo ya que terminaron neutralizándose y el marcador termino en blanco.
El complemento nos ofreció, algo, deemociones. Y es que la Selección de Alemania se insinuó más. Subieron líneas y comenzaron a meter a los italianos en su campo. Sin apenas respuesta, el equipo dirigido por Antonio Conte sufrió el primero del juego a los 22 minutos. Mario Gómez protege el balón en una banda tras un pase largo de Manuel Neuer. Rodeado, con tres italianos, el delantero metió el balón al área ante la entrada de Jonas Héctor y el lateral se lo puso a Mesut Özil, que no falló.
La Selección de Italia fue en busca del empate, que llegó casi de casualidad, por un inocente penalti de Boateng, que en pugna con Giorgio Chellini en su área, saltó con los brazos en alto y rechazó la pelota con el antebrazo. El penalti lo ejecutó Bonucci para cambiar el ánimo de la eliminatoria (33' ST).
Sólo la Selección Alemania creyó en la oportunidad que ofrecía el tiempo añadido y disparó media docena de veces sin puntería, ante un rival que no se quiso exponerse al error, esperó el del adversario y, como éste no llegaba, confió en los penaltis.
La tanda inacabable tanda de penaltis, donde les temblaron las piernas a casi todos, al final la decidió Manuel Neuer con su parada y un último acierto de un defensa el joven Jonas Héctor, que acaba con la racha italiana y envía a Alemania a Marsella, a luchar por un puesto en la final.