El dolor por la pérdida de la gran parte del plantel del Chapeoncence tardará en sanar. Miles de personas se acercan a las instalaciones del club, para despedir a los jugadores que partieron al cielo luego de un accidente aéreo.
La dirigencia, en busca de que ningún hincha se pierda de darle el último adiós al equipo, dio a conocer que el velorio será en el propio estadio Arena Condá, en esta semana: ''Nuestra idea es hacer un velorio colectivo en nuestro querido estadio (...) porque todas las personas quieren mostrar su apoyo, darse un abrazo", dijo el vicepresidente, Iván Tozzo.
A las afueras del estadio, se simuló una especia de altar improvisado, donde los hinchas dejan flores, mensajes y sus propias camisetas: "No se cansó de subir y ahora está en el cielo", decía la tarjeta de que un niño dejó en el lugar.
En la pequeña ciudad de Chapecoense, de unos 210.000 habitantes aproximadamente, las escuelas han suspendido sus clases por dos días. A su vez, miles de fanáticos del cuadro brasileño realizaron una vigilia el día martes en el Arena Condá.
El siniestro ocurrió en Cerro Gordo, entre los municipios de La Ceja y La Unión, en el departamento de Antioquia (noroeste), informó el aeropuerto José María Córdova de Rionegro, que sirve a Medellín, en un comunicado. La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) movilizó a alrededor de 150 operativos de los equipos de socorro y activó su red hospitalaria.
Primero hubo una declaración de emergencia y unos minutos más tarde se registró el accidente, dijo a la AFP un portavoz de la Aeronáutica Civil. Nueve futbolistas del Chapecoense no viajaron a Colombia por decisión técnica y se quedaron en Brasil: Rafael Lima, Neném, Demerson, Marcelo Boeck, Andrei, Hyoran, Alejandro Martinuccio (argentino), Moisés y Nivaldo.
LEE ADEMÁS: