Un hecho insólito ocurrió en la primera división de Bolivia. Universitario de Sucre, cuadro que es una de las sorpresa de la actual Copa Libertadores y está cerca de clasificar a octavos de final, envió a la cancha apenas siete futbolistas para su encuentro ante Bolívar. Lo más escandaloso: eran juveniles.
El motivo de tamaña decisión fue que Universitario solicitó a Bolívar la suspensión del partido porque este martes recibe a Mineros de Guayana, en un partido que le puede dar la clasificación. Sin embargo, los paceños se mostraron intransigentes al pedido y lo tramitaron muy tarde en la asociación.
Como represalia, el técnico Julio César Baldivieso decidió enviar al partido de este sábado a apenas siete juveniles de entre 16 y 18 años. En solo 10 minutos Bolívar ya ganaba 2-0, hasta que el jugador Laura se lesionó en la visita y obligó, según el reglamento, a suspender el partido a los 12 minutos.
Foto: APG