Era el minuto 56 y Gerard Piqué perdió los papeles con el juez de línea. Se llevó la roja y echó a perder todo el esfuerzo de Barcelona, que buscaba remontar el partido ante Athletic de Bilbao en la final de la Supercopa de España, luego de ponerse adelante con gol de Lionel Messi.
Barcelona vencía 1-0 con gol de Lionel Messi y la épica era posible. Sin embargo, Gerard Piqué arruinó toda posibilidad de la gran remontada con una irresponsable expulsión por roja directa.
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El central del Barcelona no jugará el domingo en San Mamés en Liga debido a que la normativa cambió y cualquier sanción en la Supercopa de España ahora se debe cumplir inmediatamente, no solo cuando era grave, como sucedía hasta en la pasada edición.
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— Diario El Bocón (@elbocononline) agosto 17, 2015
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