En una entrevista concedida a La Cuarta, Ximena Suárez, azafata boliviana que vivió los momentos más terribles de su vida en la tragedia del Chapecoense el año pasado, reveló algunos detalles del accidente y confesó que si por ella fuera, nunca más se subiría a un avión.
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“Ahí vamos, tratando de superar lo que ocurrió. Fue algo muy fuerte, pero con la ayuda de Dios y mi familia he podido salir adelante. Sinceramente, como que traté de borrar todo eso y con la ayuda de Dios he podido superarlo. Realmente, fue un milagro. Era urgente viajar para nosotros en ese momento y, bueno, pasó lo que pasó.”, precisó Suárez.
Ante la pregunta si es que la azafata había recibido tratamiento terapéutico, Ximena Suárez manifestó lo siguiente.
“Claro, hace varios meses que me encuentro en tratamiento psicológico y psiquiátrico. Es la única manera de superar algo tan fuerte, tan traumático. He tratado de estar al margen de las cosas que ocurren, para estar mejor. Sinceramente, si de mí dependiera, no me volvería a subir a un avión otra vez. Me da mucho miedo. Fue algo muy traumático.”, afirmó.
Cabe recordar que el 28 de noviembre del 2016, el avión que transportaba al equipo del Chapecoense rumbo a Colombia para jugar la final de la Copa Sudamericana ante el Atlético Nacional, se estrelló en Medellín cobrando la vida de 77 personas entre ellos 46 jugadores y empleados, 21 periodistas y 10 miembros de la tripulación. Sobrevivieron 6 personas, 3 futbolistas, 2 tripulantes y Henzel.
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