Tras conocerse la decisión de Diego Costa de renunciar a la jugar por la selección de Brasil, se da cuenta de una larga relación de jugadores brasileños que prefirieron vestir la camisa de otra selección.
Thiago Motta es un ejemplo parecido, puesto que jugó con la selección brasileña sub 23 en un torneo de categoría absoluta, la Copa Oro de 2003, y luego se enroló en Italia, selección con la que participó en la Eurocopa de 2012.
La lista de brasileños que han jugado con otras selecciones es larguísima, con casos de éxito como Deco y Pepe, que debutaron con Portugal de la mano del actual seleccionador brasileño, Luiz Felipe Scolari.
En España no menos notorio fue el éxito del centrocampista Marcos Senna, que fue titular en el once campeón de Europa en 2008, y que siguió la estela de Donato, Becerra y Catanha.