Escribe Gonzalo Menéndez
Wilmar Valencia no se conforma con ser el técnico del puntero Alianza Lima. "Bam Bam" lamenta que el jugador peruano -por ende incluidos los de su equipo- no se han profesionales y por ello dice que si Perú va al Mundial, será un mero participante más.
Ha cambiado el fútbol en comparación cuando usted lo jugaba?
Claro que sí. El fútbol comienza a cambiar a partir de los profesionales, cuando aplican la ciencia en el deporte. A partir de allí la preparación es distinta. Los técnicos trabajan diferente a partir de las estrategia, un respaldo físico, el conocimiento de las capacidades individuales y en base al conocimiento de las fortalezas, de las debilidades del rival. A partir de los 90 comienza el cambio, pero en el Perú pienso que todavía. Si bien es cierto que ya existen algunos equipos que trabajan con estos aspecto, hay clubes que todavía trabajan de forma obsoleta en el fútbol actual.
Hay jugadores profesionales en el Perú?
No nos preparamos como profesionales. Hay que formar al jugador profesional con una base sólida y tener fundamentos importantes. Yo hago una encuesta hoy en día a jugadores sobre el conocimiento de conceptos tácticos, defensivos u ofensivos, conocimientos de sus fortalezas y debilidades, sobre el conocimientos de sus compañeros, de los rivales y eso me indica que no es profesional. Lo jugamos, entrenamos por obligación, porque pensamos que hacemos un favor al cuerpo técnico o a la institución y no lo hacemos por convicción.
Por lo menos se acercan?
El porcentaje es muy bajo de jugadores que se acercan a lo que se pretende ser un profesional. Tal es así que dentro de los equipos donde trabajo hago encuestas. Suele suceder, por ejemplo, el partido del rival lo televisan y tenemos posibilidad de verlo. Pregunto en el primer entrenamiento cuántos lo vieron, se da el caso de ninguno o uno o dos nomás lo vieron. Esto te indica una preocupación.
Se imagina a Perú en el Mundial?
Sí, pero si clasifica es para participar, para ilusionarnos, para festejar, pero la realidad es otra. Tenemos que ser objetivos. Si se clasifica vamos a ser uno de los 32 países, pero no vamos a competir.
Es de raza ser futbolista?
Es de raza, idiosincracia y sangre definitivamente. A partir de allí es el entorno familiar, formativo, preparación. De todas maneras es raza. Los equipos que tienen raza son los que generan las diferencias. Perú no es un país ganador.
Son conformistas
Qué balance se puede ser de Alianza en estas fechas?
Es bueno. Pienso que en el fútbol peruano, con trabajo y no con el cien por ciento, se puede estar como estamos nosotros. Nosotros, con este plantel, vamos a luchar, pero vamos a tener este tipo de circunstancias que no se mantiene una regularidad, nos confundimos muy rápido. Por naturaleza somos conformistas.
Cuánto significa la disciplina en Alianza?
Es un porcentaje importante en el equipo. Primero va la inteligencia. Si se usa la inteligencia los otros aspecto se llevan más fácil. El tipo que se da cuenta cuál es el camino a elegir está bien. Luego viene el trabajo para mí. Esos tres aspectos van de la mano.
A diario le repite a sus jugadores mantener la calma...
Sí, pienso que ocupo demasiado tiempo repitiendo muchos temas. Algunas veces uno espera que el entendimiento sea mucho más rápido, pero es una lucha fuerte.
A Yordy Reyna le habla especialmente por todo el momento que vive?
Sí, pero no soy especialista. Se necesita a uno del campo de la sicología. Yordy necesita primero ubicarse, saber dónde está y luego saber dónde ir.
Está para salir a Europa?
Quizas es el jugador que más ha producido y más expectativa ha generado. Creo que le falta mejorar algunos aspectos. Sería lindo que deje algo para Alianza. Que no se preocupen tanto por irse. Que sea una consecuencia natural. O sea, todo lo bueno que deje en el club y dar el salto. Tener las ideas claras y firmes.
Es imprescindible en su equipo?
Yordy, por el rendimiento del equipos, se hace muy importante, ya que carecemos también de delanteros, donde solo están Aguirre, Mostto y él.
Cuanto afecta las fallas arbitrales a Wilmar Valencia
He cambiado bastante mi carácter. Si bien es cierto en este torneo con Cristal hubo una reacción con Garay, he cambiado, soy más tolerante. He mejorado en el control de mis emociones. Eso no significa que me queda callado. Hay cosas que me indignan y si tengo que manifestarlas lo voy hacer. No falto el respeto a nadie. Solo hago reclamos y trato que vean que el árbitro se está equivocando. Pido que se preparen mejor, ser imparciales y ser lo más justos posibles. En un partido que lo ganen o lo pierdan los jugadores, no por incidencias, por fallas netamente arbitrales.