Johnnier Montaño volvió a pisar Matute y lo hizo con la sonrisa en los labios, rememorando tardes gloriosas con la blanquiazul y sientiendo nuevamente el afecto de sus compañeros. A primera hora el colombiano se presentó ante Gustavo Costas y compañía, quienes lo recibieron de la mejor manera. Evidenciando un mejor estado atlético, el volante se puso a disposición del comando técnico y entrenó con el primer equipo. Trotes y elongaciones leves marcaron su rutina, mientras aprovechaba en conversar con sus amigos para informarse de las novedades íntimas. Culminada la práctica Montaño se internó en la concentración blanquiazul donde, a pedido de los referentes del equipo, almorzó con el grupo.