:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/HO2ZMJV3KRGKHFCQU22KN3ELZQ.jpg)
Las estadísticas, que suelen ser frías e inapelables, dicen que cuando Perú y Chile se ven las caras, los marcadores suelen ser escuetos. Sin embargo, la blanquirroja le pudo girar la tuerca dos veces a la historia. Y fue en 1953 y 1995 donde se consumó, a nuestro favor, las mayores goleadas sobre el equipo de la Estrella Solitaria. Es cierto, ambas se dieron en partidos amistosos. En 1953, como decimos en el párrafo de arriba, la selección peruana arrolló a Chile por 5-0. Y en 1995 (otra vez en el coloso de José Díaz) el cotejo culminó 6-0. Por ese motivo -y para ir calentando el clásico del fin de semana- EL BOCÓN habló en primer término con el gran Tito Drago y el no menos enorme Joe Calderón, quienes jugaron el choque del año 53. Fue un partidazo. Nosotros siempre teníamos de hijo a los chilenos y lo ratificamos aquella vez. Recuerdo que yo hice un golazo y todo el país vibró de felicidad. Fue 5-0, pero tranquilamente la cuenta pudo ser mayor de no ser por la labor del golero visitante. La sacaron barata, rememora Tito. Joe Calderón, que se desempeñaba como zaguero central, da participa de la tertulia. Y reafirma que esa goleada sobre Chile fue inolvidable. Fue uno de los mejores partidos de mi vida. Ese día nos salió de todo y no sólo porque estuvimos efectivos de cara al gol, sino por la entrega que pusimos los once jugadores en el terreno de juego. Cada vez que me acuerdo la cara de los chilenos en ese partido me da risa, creo que querían que se los trague la tierra. Fue un baile a todo dar, sólo faltaron los pañuelos para bailar marinera, confiesa un veterano Joe pero todavía lleno de vitalidad y de recuerdos. Para ambos ex futbolistas, Chile jamás significó un hueso duro de roer. Antes Chile era papayita, ya que les ganábamos en Lima y en Santiago. Siempre les anoté goles, eran mis hijos. Pero ahora todo es diferente, veo que han evolucionado, acota Roberto Drago. Calderón, por su parte, añade que Chile nunca nos dio problemas. Sin embargo, por lo mismo que se trataba de un clásico había ocasiones que nos hacían sufrir más de la cuenta, aunque en líneas generales las estadísticas siempre jugaron a nuestro favor. DIAS FELICES Alfonso Dulanto integró el equipo bicolor que, en 1995, despachó a Chile 6-0. El Pocho narra detalles de aquella noche inolvidable. Qué te puedo decir de ese partido. Simplemente ese día fuimos una máquina de buen fútbol. Tres goles de Ronald Baroni y tres de Flavio Maestri sellaron uno de los días más felices de mi vida, sostiene el ex zaguero de Universitario. Y agrega: Para colmo en ese partido, casi al final, Miguel Miranda le ataja un penal a un chileno. ¡Imagínate!, todo jugó a nuestro favor. Pero lo más bonito fue que la gente estuvo muy contenta, todos salieron a la calles a festejar la goleada. Todo el Perú vibró y celebró la victoria ante Chile, el rival de toda la vida, con el que está prohibido perder. Cómo ganarle el domingo a Chile? Interrogamos a los protagonistas del reportaja. Tito Drago, con su andar pausado y frase exacta, reconoció que no ha seguido de cerca el accionar del equipo del Chemo, pero cierra el puño con fe y espera que la blanquirroja haga respetar la casa. Sé que nuestra situación en la tabla no es de las mejores, así que la única consigna que tenemos es salir a ganar a los chilenos. Ojalá que los muchachos estén inspirados y se les abra el arco. Mi score? Ganamos 2-0 con goles de Johan Fano y Nolberto Solano. Otro resultado no pasa por mi cabeza, subraya. Joe Calderón también se abraza al optimismo. Vamos a ganar, eso lo firmo. No te digo por cuánto, pero confío en los muchachos. Perú tiene que jugar a ras del piso, ese juego aloca a los chilenos, los saca de sus casillas. Aunque lo más importante es aprovechar nuestra opciones de gol. A la gente le diría que haga sentir la presión al rival, que los pifien, pero sin llegar a la agresión. Perú, por historia, siempre fue superior a Chile y el domingo lo tenemos que demostrar para felicidad de todo el pueblo peruano, sentencia. Por último, Pocho Dulanto se disfrazó de chef y le dio la receta a Chemno del Solar para salir airosos del choque con los rotos. Vamos a jugar con esa picardía innata del futbolista peruano, tocando el balón y haciendo paredes. Te aseguro que de esa manera vamos a festejar una victoria ante el clásico rival que nos permita seguir con vida en las eliminatorias mundialistas. Fin de la nota. Roberto Tito Drago, Joe Calderón y Alfonso Dulanto unen sus manos. Y esperan que este domingo Perú, tal como ellos lo hicieron hace algunos años, logren la victoria ante Chile para que el pueblo peruano ensanche la sonrisa y recupere la fe. Quizá, como es lógico, no alcance para sacar el boleto rumbo a Sudáfrica. Pero salir airoso ante el clásico rival siempre será bienvenido. El equipo del Chemo, por lo tanto, tiene la palabra.
