Escribe Omar Dávila
En Montevideo Sergio Markarián demostró que aún tiene la herida abierta. Está dolido por el bajo índice de respaldo popular que obtuvo tras la eliminación al Mundial, con sus detractores en la prensa, y mantiene firme su postura de no volver a nuestro país.
Pero lo que aún es más evidente es su desapego por hablar de la nominación de Pablo Bengoechea como su sucesor en la selección. Tanto que ni habiendo sido su asistente le brinda claramente su apoyo, porque de fuentes altamente confiables en la VIDENA , trascendió que entre sus recomendaciones a la Federación Peruana de Fútbol antes de irse, Markarián habría expresado que de haber clasificado nuestra selelección a Brasil 2014, él pasaría a ser Jefe de la Unidad Técnica y que de cara a Brasil 2014 su reemplazante debería ser un entrenador nacional, hasta se filtró un nombre: Roberto Mosquera. Y en las demás categorías, salvo Daniel Ahmed en la Sub-20, el resto también tenían que ser locales: Víctor Rivera, Julio César Uribe y Franco Navarro.
Evade respaldo
Y Bengoechea? Debía entonces iniciar su carrera profesional como técnico en un club, vivir su propia experiencia. No continuar siendo parte de un comando de selección y mucho menos ser el líder tan prematuramente.
Así, con la herida abierta, reacio a dar entrevistas a la prensa, igual era importante revelar con palabras -o sin ellas- el sentir de Markarián en este crucial momento.
La idea era que diera un mensaje de respaldo a Bengoechea, sin embargo su respuesta fue contundente: "Pero no lo voy a dar. No tengo interés que en el Perú se sepa que yo opino de algo. No quiero opinar de nada".
Ni siquiera el hecho de que haya sido el Profesor su asistente, merecía un gesto diplomático de decoro de su parte. Más pudo el orgullo personal que la sabiduría de sus años o la paz de la fe que profesa.
"No voy a opinar Omar, entiende, no voy a opinar. Me han llamado de varios medios (de Perú y otras partes del mundo) y les he dicho lo mismo. No voy a opinar", insistió.
El reposo del Mago
Actualmente el Mago pasa sus días en Montevideo al lado de su esposa Elizabeth, sus hijos y nietos. Sin embargo todo indica que viajará a Brasil en junio próximo para espectar la Copa del Mundo y nutrirse como de costumbre, de información.
"¡Ah, qué bueno!, me alegro mucho que EL BOCÓN esté presente en el Mundial. Pero si voy o no (a Brasil 2014) de eso no te voy a declarar nada (ríe por fin), ni de Perú, ni de mí. Saludos a ustedes por su aniversario", manifiesta el uruguayo.
La entrevista que EL BOCÓN le hizo a Pablo Bengoechea fue motivo también de su lectura por internet. "Sí, la leí, ya la leí, estuvo muy buena. Le desee suerte pero de eso no tengo nada que decir, entendés?", repitió casi monotemático.
Sergio sabe que el apoyo popular que tuvo al inicio de su gestión y los no pocos que aún destacan su trabajo en la blanquirroja no es endosable, de ninguna manera, pero sin siquiera eso a favor y siendo desconocido para el cargo Bengoechea, la presión mediática que le vendrá podría ser demoledora. Y prolongar 30 años de lo mismo. La máquina trituradora de carne que le dicen.
Quince segundos en silencio, con reloj, detrás del teléfono y Markarián se anima a responder, luego de pensarlo. "No..., no se cortó la llamada, aquí estoy..., te escuché nada más. Tenés razón en lo que vos decís, pero te digo que no voy a opinar nada de él (Bengoechea). Abrazo a todos en EL BOCÓN".