La experiencia con en la ha sido tan buena que ahora se anima por , en la búsqueda de un reemplazo a , quien quedó fuera de la . Con el “Santi”, la selección peruana espera ganar una nueva alternativa al trabajo táctico y de rol goleador del “Depredador”, teniendo en cuenta que el máximo símbolo de la bicolor no pasa por buen momento debido a una lesión, lleva mucho tiempo jugando muy poquito y sus 37 años ya sugieren un proceso de ocaso profesional, natural para cualquier futbolista, incluso para los mejores.

Si con Gianluca Lapadula y su rol protagonista en los pocos partidos que jugó ya nos olvidamos un poco de la ausencia de Paolo Guerrero, la fórmula puede repetirse con Santiago Ormeño, un delantero más similar al “Depredador” y que puede darnos esa reserva pendiente de goles, carencia evidente con la venida menos de Paolo desde el 2020. S con Lapadula la ilusión volvió a encenderse, con Ormeño ahora esa ilusión vuelve a convertir a la selección peruana en un hábito mayor dentro de nuestras expectativas.

Guerrero, un hábito que empieza a acabar

Eso sí, Paolo Guerrero, aún con 37 años, una vez recuperado por completo y con minutos de juego dentro del promedio, seguramente volverá a ser infaltable en las convocatorias de Ricardo Gareca, quien lo dejó fuera de la Copa América para darle reposo y mantener su status de líder y titular indiscutible, pues está claro que con el nivel actual terminaría en la banca de suplentes en casi todos los partidos. La idea del “Tigre” es darle tiempo para que se recupere y esté listo para las Eliminatorias en septiembre próximo.

Sin embargo, Gianluca Lapadula ya tiene el puesto asegurado y un buen rendimiento de Santiago Ormeño no descartaría que Paolo Guerrero sea relegado a segunda opción. No solo por su veteranía, sino además porque las lesiones lo persiguen hace buen tiempo. En todo caso, Paolo Guerrero le ha dado mucho a la selección peruana. Ha sido el héroe máximo por más de una década y todo el reconocimiento lo tiene ganado.

Pero no es un absurdo pensar en un recambio progresivo y hoy, finalmente, tenemos dos jugadores acorde a la exigencias. Ya no dependemos únicamente de Raúl Ruidíaz. Y eso, termina siendo una explosión de ilusión en la mayoría de hinchas de la selección peruana.


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