Escribe James Dávila Calixto
Ricardo Gareca arribó ayer al Aeropuerto Internacional Púlkovo de San Petersburgo para sumarse a la delegación nacional que estará presente en el Sorteo del Fixture de la Eliminatoria para el Mundial de Rusia 2018.
Una temperatura agradable de 16 grados centígrados y una tenue llovizna recibió al técnico de la selección peruana. Por esta época, los días son largos por las famosas “noches blancas”, fenómeno en el que el sol está presente en el horizonte 19 horas al día e incluso cuando se pone sobre las 10 de la noche, se mantiene una luz suficiente y nunca se oscurece por completo.
Procedente de España, donde resolvió asuntos personales, se reunió con entrenadores compatriotas suyos, agentes de fútbol y tomó contacto vía telefónica con los jugadores Cristian Benavente (del MKD de la Segunda inglesa) y Alexander Callens (sin equipo); el ‘Tigre’ asume con expectativa lo que acontezca en este evento.
EL DESAFÍO
“El nuevo desafío es consolidar esta idea de juego, solidificar esta idea. Somos conscientes de que las Eliminatorias son distintas, pero confiamos en el potencial del jugador peruano. Además, los entrenamientos no son solo en el campo, si tengo la posibilidad de comunicarme con ellos y darles indicaciones lo haré”, manifestó el entrenador.
Tras cuatro horas de vuelo desde Madrid, Ricardo Gareca se trasladó a un lujoso hotel de 5 estrellas en el centro de San Petersburgo, ubicado en la zona de Calle Nevskiy Prospekt, a 20 minutos a pie de Palacio Beloselsky-Belozersky y el Museo Estatal Ruso, donde están alojados desde ayer el presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Edwin Oviedo, el vicepresidente Agustín Lozano y el gerente de selecciones Antonio García Pye.
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Que siga el baile. Esto fue lo que dijo #CarlosPreciado de #AyacuchoFC, rival de #AlianzaLima http://t.co/M92slEcSiQ pic.twitter.com/LdCxCTVqiw
— Diario El Bocón (@elbocononline) julio 24, 2015
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