El operativo Uruguay ya está sobre la marcha en la selección peruana. Ayer trabajó la mayoría del plantel, por segundo día consecutivo en las instalaciones del Holiday Inn de Ezeiza (solo el sábado trabajaron en el predio de la AFA), con las novedades de Paolo Guerrero y Alejandro Hohberg. Luego del entrenamiento subieron a un bus que los llevó hasta el Aeropuerto Jorge Newbery (Aeroparque), donde tomaron un vuelo de una hora hasta Montevideo.
El hotel Sheraton de la capital uruguaya es el nuevo fortín de la concentración peruana hasta el sábado 12, un día después del partido contra la selección charrúa. Desde hoy, el comando técnico y los convocados tenían programado trabajar en las instalaciones del club Defensor Sporting. Sin embargo, en las últimas horas el rumor de cambiar de sede de los entrenamientos era una duda por resolver en la interna nacional. En tanto, los últimos en integrarse son los jugadores Alexander Callens, Carlos Ascues, Miguel Trauco, Carlos Zambrano, Marco López y Yordy Reyna.
Mueve la pizarraPaolo Guerrero prefirió no acabar la práctica en Buenos Aires por precaución. Christofer Gonzales terminó golpeado en la rodilla izquierda, pero se confía en que se recuperará para el viernes. Y desde algún lugar de la concentración, Christian Cueva dio declaraciones sobre su vida privada a un programa de espectáculos. No son urgencias, pero estas tres noticias marcaron el ambiente de los trabajos del comando técnico de Ricardo Gareca.
Con cada entrenamiento realizado, es más fuerte la duda de cómo jugaría la selección peruana contra la escuadra celeste este viernes en el Estadio Centenario. En el escenario de que es un partido amistoso pero con el rigor táctico de las Eliminatorias, invita a pensar que Gareca le volverá a dar rodaje a la fórmula con la que ganó a Brasil en Estados Unidos.
Es decir, dejar su clásico 4-2-3-1 de siempre por el novedoso 4-3-2-1. Para tal esquema táctico, Gareca debería priorizar la formación por encima de los intérpretes ya que no contará con la presencia de los lesionados Yotún y Aquino, claves en el funcionamiento de esta pizarra que se tumbó a la ‘Canarinha’.
Entonces, si el ‘Tigre’ vuelve a utilizar este sistema, los que tienen chance de jugar junto a Renato Tapia son Christofer Gonzales, quien ya lo hizo en la Copa América 2019, y Armando Alfageme, convocado en lugar de Aquino. Si el técnico nacional se decide por esta formación, Flores y Costa o Carrillo serían los volantes extremos, y Guerrero jugarían de único punta. ¿El sacrificado? Cueva, que esperaría su turno desde el banco. La apuesta se confirmará en los próximos días.