Y llegamos a noviembre. Mes de la ilusión y la esperanza, que en sus días (viernes 10 y miércoles 15) mantendrá en vilo a toda la nación peruana.
Si la ansiedad va consumiendo el día a día del hincha peruano que solo espera la clasificación de la selección peruana al Mundial de Rusia 2018, ¿cómo lo lleva el propio protagonista?
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La selección peruana ha afrontado diversos partidos en los que la presión siempre ha estado a la orden del día, sin embargo, el momento que vive la escuadra nacional, no lo esperaba nadie. Son 32 años que han pasado desde la última vez que Perú disputó un repechaje. Estando tan cerca de la clasificación, el país hermano, Chile, sacó una victoria de 4-2 dejándonos fuera de la Copa del Mundo de México 1986. La historia del repechaje se repite pero el contenido y los protagonistas no son los mismos. Por ello, en el segundo día de entrenamiento de la bicolor de cara a los partidos de la repesca ante Nueva Zelanda, el preparador físico, Néstor Bonillo, el médico, Julio Segura y el psicólogo, Marcelo Márquez, se reunieron para elaborar un plan en contra de la ansiedad y la presión, y que estos dos puntos no jueguen en contra de los seleccionados peruanos en el campo ante los neozelandeses.
Son los artífices
Más allá de la identidad que ha recuperado el técnico Ricardo Gareca en la selección peruana con respecto al juego que ha desarrollado el equipo en sí, estos tres personajes, tanto Bonillo, Márquez y Segura, también han sido piezas claves en el desarrollo de cada uno de los futbolistas. El trabajo mental, el minucioso cuidado ante una lesión y la preparación física para mantener al futbolista peruano en óptimas condiciones, han sido los grandes factores en toda la campaña del ‘Tigre’ con la escuadra nacional, y hoy, teniendo en cuenta que serán dos partidos que podrán cumplir el objetivo, la unión de estos tres temas será indispensable para conseguirlo.
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