Para recordarlo siempre. El 10 de octubre del 2017, el estadio Nacional vivió uno de los partidos más sufridos de su historia, la selección peruana recibía a Colombia por la última fecha de las Eliminatorias al mundial de Rusia 2018 e increíblemente tenía opciones de clasificar a la fiesta máxima del fútbol.
El empate sin goles en la Bombonera ante la selección de Argentina, mantuvo viva a la 'blanquirroja' hasta la última fecha. El equipo dirigido de Ricardo Gareca no tuvo su mejor partido, pues los nervios y la ansiedad se vivieron desde la salida del hotel de concentración hasta el coloso de José Díaz y los jugadores lo trasladaron hasta el campo de juego.
Un gol de James Rodríguez a los 56' minutos, parecían acabar con todos los sueños que se habían hecho los hinchas peruanos para clasificar a un mundial luego de 36 años. Sin embargo, el corazón y la garra de Aldo Corzo, hizo que este se lance sobre Frank Fabra y el árbitro cobrara un tiro libre indirecto a favor de Perú.
A los 76 minutos, el delantero de la 'bicolor', Paolo Guerrero pateó el recordado tiro libre sin darse cuenta que era indirecto, sin embargo, el portero colombiano, David Ospina, tocó el balón, lo cual hizo que sea válido para el combinado patrio. El estadio Nacional vibró en su máxima expresión porque el resultado favorecía a Perú, además de los otros marcadores que se daban en los partidos en simultáneo.