La selección peruana está penúltima con apenas cuatro puntos en las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Rusia 2018 y mañana enfrentamos a Ecuador por la octava fecha del torneo premundialista y una derrota ante el 'Tricolor' hace que todo el pueblo peruano se haga una pregunta obligada: ¿Debe irse el entrenador argentino Ricardo Gareca si perdemos mañana a las 9:15 p.m. en el Estadio Nacional ante los vecinos del norte?
A nuestro entender el 'Tigre' Ricardo Gareca no debe abandonar el barco y al contrario seguir remando con los jugadores jóvenes de la selección peruana para que estos sigan adquiriendo experiencia de cara a las próximas eliminatorias para Qater 2022. Como dice Roberto Mosquera, entrenador de Alianza Lima: "Los jugadores que tienen jerarquía, los referentes, no han demostrado compromiso y los que tienen compromiso les falta partidos para tener jerarquía".
Además, Ricardo Gareca no debe irse porque estamos acostumbrados a que los técnicos rescindan contrato sin pagar una penalidad a la Federación Peruana de Fútbol por no cumplir con su contrato y luego cuando salen a dirigir a otro club o selección, lo hacen en forma exitosa logrando títulos o clasificaciones a una Copa del Mundo como sucedió con otros entrenadores que dirigieron a la Blanquirroja.
Cambiar de entrenador a estas alturas sería volver a foja cero, empezar de nuevo, a probar otro estilo de juego, aunque a esta selección peruana no se le ve por ningún lado su característica de pararse y moverse en la cancha. La solución es que Ricardo Gareca continúe trabajando, que siga observando en provincias nuevos jugadores y que no solo los convoque para cuando se presentan partidos de altura en La Paz o en Quito, sino que los prueba si pueden dar la hora ante equipos o rivales fuertes como Brasil y Argentina. Sólo sí podrá comprobar si son útiles para la próxima eliminatoria o solo son jugadores de clubes.