Volvió el fútbol, regresó la salsa, retornaron los goles y los triunfos de la ‘Misilera’. En el Primer Puerto, hasta ahora deben de estar celebrando la primera victoria como local del Sport Boys anoche en el estadio Miguel Grau del Callao, por la segunda fecha del torneo de Segunda División. Esta vez la víctima fue el Sport Loreto, equipo al que el cuadro rosado dirigido por el DT uruguayo Mario Viera venció por 3-2.
Hoy más que nunca se hace efectiva la letra de la polka que se convirtió en el himno del equipo, ‘Vamos Boys’, que dice: “No hay en el suelo chalaco un solo muchacho con más de un pulmón, que no ande ronco los lunes por tantos chimpunes que dio el Sport Boys...”.
Desde el arranque del partido se vio muy motivado al plantel porteño y eso se reflejó con lo rápido que los rosados abrieron el marcador con anotación de Mario Tajima, apenas al minuto de juego, tras un buen servicio en ‘callejón’ de Johan Fano.
El segundo gol de Sport Boys llegaría por intermedio del ‘Gavilán’, quien tras un centro por el sector derecho le ganó en el salto a la salida del arquero visitante Domínguez, aunque su cabezazo se estrelló en el travesaño y el rebote lo tomó el mismo Fano para convertir el segundo de los rosados (33’).
Guillermo Tomasevich se encargó de poner el 3-0 (43’) y todo parecía que iba a acabar en una noche tranquila a pesar de la ligera llovizna.
Sin embargo, las cosas se le complicaría un poco a los porteños cuando empezando el segundo tiempo la visita descontó con gol de tiro libre de Alexander Salas, que se lo ‘comió’ el arquero Daniel Ferreyra (47’).
Y sobre los 54’, Sport Boys pudo quedarse con diez si no fuese porque el árbitro Fernando Legario se hizo de la vista gorda, tras una agresión de Fano en contra de un jugador del Sport Loreto.
Pero los pucallpinos vendieron cara su derrota y a los 60’ Lee Andonayre, de tiro libre, anotó el segundo y con ello amenazó a la ‘Misilera’ y dejó intranquilos a los hinchas rosados, porque un equipo que pretende campeonar en Segunda, para lograr su ascenso a la Profesional, no puede acabar pidiendo la hora para que no le empaten.
Así va la tabla