El español Rafael Nadal sobrevivió hoy a la primera ronda más dura que haya tenido nunca en el Abierto de tenis de Francia para mantener así intacto el sueño de ganar seis títulos y emular al legendario sueco Bjorn Borg. Nadal, número uno del mundo, se impuso al estadounidense John Isner por 6-4, 6-7 (2-7), 6-7 (2-7) 6-2 y 6-4 en un partido en el que, como pocas veces, se lo vio con un claro miedo a perder. "Es importante vivir estos momentos complicados, aunque la verdad es que prefiero ganar en tres sets", admitió el español, que jamás perdió en la primera ronda de un Grand Slam. Hoy, empequeñecido ante el gigante estadounidense, estuvo más cerca que nunca de vivir esa experiencia.