Una mujer y un niño se vieron enfrentados por el autógrafo del argentino Lionel Messi.
La mujer, que viajó desde México para conseguir la rúbrica de la Pulga, no tuvo un lapicero cuando el jugador se acercó a los fans para firmar los autógrafos.
En ese instante, Messi cogió el lapicero de un niño que estaba cerca a la mujer.
Cuando el jugador del Barcelona pusó su firma, la fémina se llevó el autógrafo ante la sorpresa del niño. El menor reclamó que el lapicero era suyo y por lo tanto, el autógrafo le pertenecía.Por el contrario, para la señora, la firma era suya porque Messi escribió en su papel.
Al final, la madre del niño, muy molesta, arrugó la hoja ya que esta discusión causó las lágrimas del menor.