Escribe desde La Haya, Miguel Ángel Suero La inesperada llegada del empresario Raúl Gonzales, representante de Jéfferson Farfán, causó revuelo entre los hombres de prensa que se encontraban en el Bilderberg Europa Hotel, donde concentra la selección peruana. Y es que corrió el rumor que la "Foquita" podría arribar en cualquier momento para dialogar con Sergio Markarián. Gonzales pidió una habitación y cuando estaba por subir fue abordado por la prensa peruana que le preguntó a qué se debía su presencia. La respuesta fue breve, pero contundente: "ustedes saben por qué estoy aquí". Luego se retiró raudo. Esta declaración reforzó la idea de que se planificaba un encuentro con el "Mago" para intentar un posible perdón para Farfán. El rumor llegó a oídos de Sergio Markarián, quien se mostró incrédulo y al ver que los periodistas hacían la guardia en la puerta del hotel para esperar a la "Foquita", se acercó al grupo y preguntó. "A quién esperan? A Farfán?, pues no vino", dijo el estratega. Habría reunión También corrió el rumor que ante el movimiento de tantos hombres de prensa, alguien habría llamado a Farfán para que no se acerque al hotel de Perú y que la posible reunión con el "Mago" se concrete en Amsterdam, mañana, antes que la selección tome el vuelo con destino a Madrid, de donde volverá a Lima. La información acerca de la presencia de Farfán en La Haya, obedece a que Gelserkitchen, donde entrena el Schalke, está a dos horas de La Haya en auto. Por la noche, Raúl Gonzales, quien en todo momento evitó prestar declaraciones, se reunió durante una hora con sus representados Luis Advíncula y Rinaldo Cruzado.