Suspendido diez años para ejercer la dirigencia deportiva, Julio Pacheco, confiesa que su familia sufrió mucho con el vía crucis que vivió en Universitario y que no se arrepiente de haber sido presidente crema.“La nueva justicia deportiva de la que tanto se habla, creo que es absurda. Ni en la primera instancia (CJ-ADFP) ni en la segunda CJ-FPF) hemos sido citados para ejercer nuestro derecho de defensa, ambas resoluciones son un desafío a la inteligencia, y la impugnaremos ante la misma CJ-FPF y de ser necesario ante el TAS (Tribunal Arbitral de Deporte”, explicó el extitular merengue.“Los que más sufrieron con los problemas que afronté en Universitario fueron mi esposa, hijos, padres y hermanos y también mis amigos que me conocen muy de cerca y no sé si en algún momento podría volver a ser dirigente”, añadió.Invirtió 7 millonesAdemás de todo eso, Pacheco aseveró que su empresa (Grupo Santo Domingo) invirtió siete millones de dólares en tratar de reflotar al club, pero que por estafas y boicot de personas mal intencionadas.“Conozco poco al señor (Guillermo) Alarcón, y me parece mal que me comparen con él, yo no soy ningún advenedizo o desconocido, yo vengo de la empresa privada y sigo haciendo empresa, durante mi paso por la U pusimos recursos por 7 millones. No sé si eso haya hecho Pocho para que me comparen”, subrayó.Finalmente dijo: “nosotros fuimos estafados, el señor Abraham Alfredo Barreda Chávez, representante del fondo de inversiones de Exo-Jard Grupo Constructor prometió una inversión de 35 millones de dólares y no se hizo. Por eso lo denunciamos”.