Realizar una rabona mientras uno juega un partido de fútbol debe ser una acción bien complicada, la que solo jugadores con mucha calidad técnica lo pueden hacer. Y sin duda, anotar un gol así debe ser orgásmico.
Eso sucedió este sábado en Inglaterra, en un partido entre el Worcester City y el Barrow.
El mediocampista ofensivo Sean Geddes recibió un balón largo al borde del área, la paró como los grandes, se acomodó y de pronto sacó una rabona precisa que terminó en un golazo para el Worcester.
Sin duda, una acción sobresaliente.