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Universitario de Deportes no pudo alcanzar el título este año, pese al buen inicio de campaña. Los merengues, tras ese Apertura, tuvieron un pésimo segundo semestre debido a la salida de futbolistas importantes como Raúl Ruidíaz y Edison Flores, además, de no contratar buenos elementos para la segunda parte del año. Los funcionarios ficharon al defensa Diego Rodríguez y al volante Juan Pablo Pino, siendo este último el peor fichaje de la temporada 2016 en Ate.
Juan Pablo Pino llegó a la institución bajo un ambiente de duda por su rendimiento. Estuvo sin jugar casi un año y eso en futbolista es muy determinante, además, conllevó a tener problemas para su inscripción en la Federación Peruana de Fútbol (FPF). Eso perjudicó a Universitario de Deportes con la perdida de tres puntos, en mesa, del clásico disputado en Matute el 17 de setiembre por la etapa de liguillas
Otro detalle no mayor y que no fue tomado en cuenta por la administración, liderada por Raúl y Humberto Leguía, fueron sus constantes lesiones. Juan Pablo Pino estuvo más tiempo en las salas de rehabilitación que en los campos de juego. En el Descentralizado disputó cuatro partidos y anotó en una ocasión. Su producción quedará como anécdota y refleja la poca visión de los funcionarios merengues en cuánto a fichajes.
Juan Pablo Pino tuvo su última oportunidad el 27 de noviembre, cuando Universitario de Deportes recibió a San Martín por la última fecha de las liguillas. No obstante, jugó unos minutos, porque una lesión lo obligó a salir del campo y fue reemplazado por Diego Guastavino.
La nueva administración, liderada por Raúl Moreno, vio el contrato del jugador y no concibió que el mediocampista de Universitario de Deportes gané 15 mil dólares. Un sueldo demasiado elevado para su poca producción. Por esa razón, le bajaron el dedo y dejaron ese cupo de extranjero para un elemento foráneo que si pueda aportar a la institución.
Nadie duda que Juan Pablo Pino haya sido un buen jugador a tal punto de militar en Mónaco de Francia, pero llegó al Perú fuera de forma física y eso pasó factura. El deportista de 29 años se fue por la puerta falsa del club y pocos –o nadie- recordarán esta etapa.
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